Los Ángeles, Nueva York – Los Dodgers de Los Ángeles lograron un impresionante triunfo al superar un déficit de cinco carreras para derrotar a los New York Yankees 7 y conquistar coronarse campeones de la Serie Mundial en cinco juegos.
Este campeonato marca el octavo en la historia de la franquicia y el primero en una temporada completa desde 1988.
La victoria se forjó en un emocionante octavo inning, donde elevados de sacrificio de Gavin Lux y Mookie Betts permitieron a los Dodgers completar la remontada en el icónico Yankee Stadium.
Desde el comienzo del partido, los Yankees mostraron su poderío ofensivo. Aaron Judge y Jazz Chisholm Jr. conectaron jonrones consecutivos en el primer inning, y un sencillo productor de Alex Verdugo sacó del juego al abridor Jack Flaherty en la segunda entrada. Giancarlo Stanton amplió la ventaja con un jonrón en el tercer inning, colocando a Nueva York con una ventaja de 5-0.
Sin embargo, el dominio del abridor de los Yankees, Gerrit Cole, se desmoronó en el quinto episodio, donde una serie de errores defensivos desestabilizaron al equipo. Judge cometió un error en el jardín central, seguido por un error de Anthony Volpe en el campocorto y un fallo de Cole al no cubrir la primera base tras un rodado. Estos errores permitieron a los Dodgers anotar cinco carreras sucias y empatar el partido a 5-5.
A pesar de que Giancarlo Stanton restableció la ventaja para los Yankees con un elevado de sacrificio en el sexto inning, los Dodgers volvieron a responder en el octavo. La interferencia del receptor Austin Wells permitió a Los Ángeles anotar un par de carreras, llevando el marcador a 7-6 a su favor.
El relevista Blake Treinen logró salir de un apuro en el cierre de la octava entrada al retirar a Stanton con un elevado y ponchar a Anthony Rizzo. Walker Buehler, quien regresó como relevista por primera vez desde 2018, sacó en orden el noveno inning, cerrando el juego con un ponche a Alex Verdugo, lo que desató la celebración en el terreno del Yankee Stadium.
Shohei Ohtani, la estrella japonesa adquirida por Los Ángeles, hizo historia al convertirse en el primer jugador en registrar una temporada de 50 jonrones y 50 robos, aunque su actuación en la Serie fue limitada debido a una dislocación de su hombro izquierdo.
Freddie Freeman también tuvo un papel crucial, contribuyendo con un sencillo remolcador de dos carreras que le permitió empatar el récord del Clásico de Otoño con 12 impulsadas, anteriormente establecido por Bobby Richardson en 1960.
Esta victoria se siente especialmente significativa para los Dodgers, no solo por el número de campeonatos, sino porque representa el primer título en una temporada no acortada desde 1988. En 2020, la franquicia se coronó en una Serie Mundial neutral contra Tampa Bay, pero debido a la pandemia no pudieron celebrar con un desfile.
Con 98 victorias durante la temporada regular, los Dodgers culminaron un año memorable que reafirma su lugar como uno de los equipos más grandes de la historia del béisbol.